Descripción
La escultura se abre paso, con fuerza, en Burjassot, gracias a la nueva exposición artística que llegará, a partir del 20 de enero, a la Casa de Cultura. Ese día, el artista Luis Pascual Ferrer (Teruel, 1976) presentará sus “Martingalas”, esos sueños o ideas que el autor lleva en mente, los cuales pretende presentar a los visitantes en forma de magníficas esculturas. La inauguración de la muestra tendrá lugar a las 19 h y se podrá contemplar, en los horarios habituales de la Casa de Cultura, hasta el 7 de febrero.
Según el propio autor, su obra como escultor se ha centrado, particularmente, en salvaguardar y proteger el patrimonio cultural de una zona de Teruel de la que procede él y toda su familia (la localidad de Fuentes Calientes y alrededores turolenses). Un patrimonio que, desgraciadamente, se está perdiendo, ya sea por la progresiva despoblación que sufre la zona desde hace décadas o por la desaparición de las personas más mayores que todavía lo habitan. Así, todas las esculturas que se exponen en la muestra de Luis Pascual tienen detrás una historia o una palabra relacionada con las costumbres, las tradiciones y las formas de vida de una cultura que, en la actualidad, se encuentra próxima a la desaparición.
Afincado en Valencia desde que estudió Bellas Artes y donde actualmente trabaja, desde 2002, en un reconocido taller fallero, la voluntad del arte de Luis ha sido, desde siempre, representar el tema del mundo rural, la vida de las personas en los pueblos, sus trabajos y su relación con el medio. Además, los títulos de cada pieza están escritos en el léxico particular de los pueblos turolenses como puede ser, por ejemplo, dallero, draque, ventisca, rebozo, etc. Pretende así el artista homenajear también a la “fabla” autóctona y evitar que se pierdan dichas palabras.
Los materiales utilizados para crear las esculturas son diversos: madera, hierro, poliéster, mármol, pero con lo que más a gusto se siente al artista es trabajando con el alabastro, un material muy nuestro, noble y con unas grandes cualidades para la escultura, según el propio autor.
Con esta exposición, Luis Pascual Ferrer pretende reflejar momentos de una vida pasada y casi en peligro de extinción, retenerlos en la memoria colectiva y mostrarlos a generaciones venideras, para que no olviden de donde vienen y para sepan que son lo que son por todo lo que sus abuelos y padres hicieron por ellos.